Buscar este blog

martes, 19 de mayo de 2009

ARQUITECTURA CLÁSICA GRIEGA (S. V-IV a. Cto.)

"ACRÓPOLIS DE ATENAS" (S. V a. Cto.)





Era la zona sagrada de la ciudad de Atenas, dedicada a la diosa Atenea, protectora de la ciudad.




1. Partenón. 2. Antiguo Templo de Atenea. 3. Erecteion. 4. Estatua de Atenea Promacos. 5. Propíleos. 6. Templo de Atenea Niké. 7. Eleusinion. 8. Santuario de Artemisa Brauronia o Brauroneion. 9. Chalkoteka. 10. Pandroseion. 11. Arrephorion. 12. Altar de Atenea. 13. Santuario de Zeus Polieus. 14. Santuario de Pandion. 15. Odeón de Herodes Ático. 16. Estoa de Eumenes. 17. Sanctuario de Asclepio o Asclepeion. 18. Teatro de Dioniso. 19. Odeón de Pericles. 20 Temenos de Dioniso. 21 Aglaureion.

La entrada esta enmarcada por grandes Propileos, en su interior destacan tres templos principales, todos ellos realizados en el siglo V a. Cto. durante el gobierno de Pericles, que encargó su realización a Ictinos, Calicrates, Mnesicles, Filocles y Fidias entre otros. Están realizados en mármol.

"Los Propileos" realizados por Mnesicles entre los años 437-432 a. Cto., es la construcción que peor se conserva. Tiene seis grandes columnas de orden Dórico y en su interior utiliza orden Jónico. Los Propileos dan paso al campo sagrado de la Acrópolis.






“El Partenón", realizado por Ictinos, Calicrates y Fidias entre los años 447-437 a. Cto. Es de orden Dórico, realizado en mármol. Es octástilo, períptero y consta de pronaos, naos, opistódomo y Adyton.



Las columnas dóricas tienen entasis y las que se encuentran en las esquinas están ligeramente inclinadas hacia el interior. El entablamento es más alto en el centro que en los laterales, y el espacio en los intercolumnios es menor en el centro que entre las columnas exteriores.


La naos estaba dividida en tres naves por dos líneas de columnas, y cobijaba la imagen de "Atenea Partenos", realizada por Fidias.


Las metopas, el frontón y el friso que decora el muro de la cella, estaban decorados con relieves y esculturas realizadas también por Fidias (ver escultura clásica: Fidias).


"El Erecteion" realizado por Filocles y Mnesicles entre los años 420-407 a. Cto. Está dedicado a varios dioses, que es algo extraordinario en el mundo griego, se trata de Atenea, Poseidón y Erecteo.



1. Naos consagrada a Atenea. 2. Pórtico Norte consagrado a Poseidon. 3. Naos de Poseidon-Erecteo. 4. Naos del héroe Butes. 5. Naos de Hefesto. 6. Tribuna de las Cariátides.

Tiene una estructura irregular, ya que no se atiene a la planta tradicional y juega con la diferencia de altura. Su orden es Jónico.


Es exástilo, tiene pronaos y cella, en desorden y a diferente altura tiene otras dos cellas o naos, una dedicada a Atenea y otra a Poseidón, apareciendo así una fachada triple. Tiene otros dos pórticos laterales, uno de los cuales está decorado con Cariátides.


El friso va todo él decorado.

"Templo de Atenea Niké" realizado por Calicrates entre los años 421-415 a. Cto. Se encuentra cerca de los Propileos. Tiene 8 x 5 metros, las columnas son de orden Jónico realizadas cada una con un solo bloque de mármol. Tiene el friso decorado. Es tetrástilo y solo tiene naos con columnas in-antis, y es anfipróstilo.




"Santuario de Apolo en Delfos", introduce el Capitel Jónico (450).




El conjunto arqueológico de Delfos ocupa una serie de terrazas situadas a distintos niveles, en las laderas del Monte Parnaso. En la zona central se encuentra la Fuente Castalia, que en su tiempo estuvo decorada con un muro de mármol. El agua salía por bocas que representaban cabezas de animales esculpidos en bronce. La Fuente Castalia surtía de agua al santuario y en ella bebía y realizaba sus purificaciones la sacerdotisa de Apolo, la Pitia.

En las zonas inferiores se situaban el gimnasio, del siglo IV a.C., dotado de una pista de entrenamientos, la palestra, las termas y una piscina circular, y la terraza denominada Marmariá, en la que en su día se levantaban dos templos destinados a Atenea Pronaia.

El más antiguo fue destruido como consecuencia de un desplome de piedras de la montaña, en tanto que el nuevo, levantado en el siglo IV a.C., es un templo dórico cuya planta tiene unas dimensiones de 22,60 por 11,55 metros.

Cerca de los vestigios del templo de Atenea, en la terraza Marmariá, se sitúan los huellas del tholos, templo de planta circular fechado también en el siglo IV a.C. Su alzado se apoyaba en 20 columnas dóricas situadas en la parte exterior, contando con otras 10 columnas jónicas en el interior. Se encuentra reconstruido parcialmente, destacando, puestas en pie, tres de las columnas y parte del entablamento. No se conoce la advocación a la que se rendía culto en este templo. Hablaremos de él en la Arquitectura Helenística.


La zona consagrada al santuario de Apolo ocupa la tercera zona aterrazada, la más alta de las tres, situándose más allá de la Fuente Castalia. Alcanza unas dimensiones de 190 por 135 metros y se caracteriza por la fuente pendiente del terreno. En conjunto, existe un desnivel del orden de los 70 metros entre las partes más altas y más bajas del santuario.

Entre esos tesoros destacan, como más importantes, el de los Sifnios (525 a.C.) y el de los Atenienses (490 a.C.). El segundo guardaba las ofrendas de la ciudad de Atenas tras la victoria militar de Maratón. Los escritores antiguos nos han transmitido que la décima parte del botín obtenido en esa batalla fue consagrado al dios Apolo en Delfos como acción de gracias.

Reconstrucción del "Tesoro de los Sifnios" con sus cariátides y resto de una cariátide:



"Tesoro de los Atenienses":



En la zona más alta del santuario, al final de la Vía Sacra, se levantaba el templo de Apolo, estando protegida toda la zona por un sólido muro construido en aparejo poligonal cuya función era evitar el posible desplome del terreno. Hubo varios templos consagrados a Apolo, en tiempo sucesivos. Los vestigios actualmente existentes corresponden al sexto templo, que se edificó en el siglo IV a.C. con fondos procedentes de una colecta panhelénica. Es un templo períptero, dórico y hexástilo. Contaba con seis columnas en los frentes y quince en sus lados, con unas dimensiones de 60,32 por 28,32 metros. En su pronaos estaban gravadas las sentencias de los Siete Sabios de Grecia: “Conócete a ti mismo, nada en demasía” entre otras.


En las inmediaciones del templo de Apolo, apoyando su graderío en la ladera, se conserva el edificio del teatro, del siglo IV a.C., que tenía capacidad para 5.000 espectadores.



Las competiciones físicas se realizaban en el estadio, cuya planta se conserva en la zona oeste del conjunto arqueológico. La pista tenía unas dimensiones de 178 por 25,6 metros, contando este edificio con capacidad para 7.000 espectadores. Sus orígenes se remontan al siglo V a.C., siendo ampliado posteriormente por Herodes Ático.



En Delfos se encontraba, precisamente, el ónfalo, ombligo del mundo antiguo, situado en el adyton del templo de Apolo y representado por una piedra de mármol recubierta por una decoración que asemeja una red tejida en lana blanca. En Delfos, el centro del mundo clásico, Apolo se ponía en contacto con los hombres para comunicarles sus decisiones sobre la conveniencia o no de realizar determinadas acciones.



ÉFESO


El templo fue diseñado por el arquitecto griego Quersifrón, de la ciudad cretense de Cnosos y construido alrededor del año 550 a. C. a expensas de Creso, el poderoso rey de Lidia. Fue terminado por Metágenes, hijo de Quersifrón, con ayuda de Teodoro, el arquitecto del Hereo de Samos.



La mayoría de las descripciones físicas del templo provienen de Plinio el Viejo, aunque hay discrepancias en torno al tamaño. Plinio describe el templo como de 377 pies de largo (115 m) por 180 pies de ancho (55 m), realizado principalmente en mármol, es el más grande de todo el mundo griego. Constaba de 127 columnas, cada una de 60 pies de alto (18 m), igual a 12 veces el diámetro de la base.

Tenía tres filas de columnas en la fachada occidental (con un total de 36), divididas en tres hileras de ocho columnas, dos columnas a los lados de las antas y una doble fila que dividía el gran pronaos en tres naves.

La cella era alargada y estrecha, como en los templos arcaicos, y al fondo había un baldaquino, en el que se hallaba la estatua de culto, sobre los restos del altar del siglo VII a. C.

"Escultura de Artemisa" (Museo de Éfeso):



En la fachada posterior las columnas eran 9, y 21 a los lados.

Tras el incendio provocado del 356 a. C., la obra de reconstrucción debió durar mucho tiempo, si el propio Alejandro Magno, en el 334 a. C., ofreció a la ciudad los medios financieros para poder terminar los trabajos. Oferta, que según Estrabón, rechazaron los efesios, aduciendo que no era conveniente que un dios le construyera un templo a otra divinidad.


La planta y las proporciones del nuevo edificio se mantuvieron groso modo iguales a las del anterior, salvo por el añadido de un crepidoma (la plataforma sobre la que se eleva el templo) escalonado (12 gradas) de 2,68 m de altura. Tenía columnas esculpidas en la parte inferior (sólo las 16 de las dos primeras filas de la fachada occidental), mientras que una veintena de dados esculpidos sostenían las columnas in antis. Las columnas, según Plinio, medían 60 pies de altura (17,65 m), aproximadamente 10 veces el diámetro de la base. Se ha pensado que el arquitecto del nuevo templo fue Dinócrates, que estuvo influido por Piteo, el autor del templo de Atenea de Priene.

La decoración corrió a cargo entre otros de Escopas de Paros.

1 comentario: