Buscar este blog

domingo, 4 de octubre de 2009

ESCULTURA GÓTICA ESPAÑOLA S. XV: SEBASTIÁN DE ALMONACID


Sebastián de Almonacid (Torrijos 1460-1526) escultor toledano, muchos lo identifican con Sebastián de Toledo.

Parece ser que en los primeros momentos recibió enseñanza del artista Egas Cueman, que fue quien introdujo el nuevo estilo flamenco de escultura en España. Su amistad con los artistas Alonso de Covarrubias, Antón Egas y su hermano Enrique, así como Juan Guas, todos ellos consumados arquitectos y escultores, dieron por aquella época una importancia a Torrijos a causa de los distintos encuentros que en esta población realizaron. No en vano, junto con otros menos conocidos, llegaron a formar lo que desde hace tiempo denomino el “Grupo Torrijos”.

Trabajó junto con otros muchos artistas en el "Retablo de la Catedral de Toledo".

Trabajó también en "La Capilla del Condestable" o de "San Sebastián" de la Catedral de Toledo, en la que destaca su "Sepulcro de Don Álvaro de Luna y Doña Juana de Pimentel", aunque su autoría no es reconocida de forma unánime.


Realizada en alabastro, las figuras de los dos nobles aparecen recostadas, como dormidas, sobre un lecho. Se trata de dos sarcófagos separados, una para cada esposo. bordeando cada sepulcro coloca a un orante en cada esquina, en un lado franciscanos y en el otro caballeros de la Órden de Santiago.


En los laterales aparecen ángeles portando el escudo familiar.


Hay tratamiento de los pliegues de los ropajes.


Hay más sepulcros rodeando la capilla, adosados al muro, pero los más destacados son éstos.

"El Doncel de Sigüenza" (Alabastro, 1486) o "Sepulcro de Dom Martín Vázquez de Arce" (Catedral de Sigüenza, Guadalajara). Don Martín Vázquez de Arce fue un militar que murió, con 26 años, en la guerra por la toma de Granada por parte de los Reyes Católicos.


El sarcófago está cobijado bajo un arco de medio punto en una capilla de la familia en la catedral de Sigüenza. La tipología del sepulcro es la del adosado a la pared, con el difunto recostado. Está vestido con la coraza y leyendo. En el pecho tiene la cruz de la orden de Santiago. A los pies está un paje o un niño con un animal. En la parte frontal presenta a dos personas que sostienen un escudo; se completa el espacio con decoración vegetal.


El Doncel aparece con un gesto cansino y crepuscular, como cansado de leer y con la cabeza caída, pero al mismo tiempo transmite reposo y placidez. Es significativa la unión de las armas, en defensa de la fe contra el infiel, y de la lectura, como un medio excepcional para alcanzar la sabiduría. Se trataba de un joven formado en las artes, las letras y las armas, fallecido prematuramente.


No hay comentarios:

Publicar un comentario